Centro de Ecoturismo Tierra del Agua

Fantastic views from the room and a wonderful location if you want to hike the Desfiladero de los Arrudos. The road up to the hotel is steep, but doable with a normal car and is well-signposted. However, we found the hotel itself a bit disappointing. The rooms could use a bit of maintenance - our bathroom door had somehow locked itself so we could not get back into it, and the curtains fell off the window when we tried to close it. Upon arrival, we filled out a list with our breakfast wishes and had high expectations about the home-made cake and bread. When breakfast was finally delivered the next morning (20 minutes later than agreed), it was a bit disappointing to find plastic-wrapped pieces of refrigerated bread and coffee capsules to brew coffee ourselves (not sure why I then order a latte?). It would do the location so much more justice if breakfast was served from the restaurant with actual fresh bread and coffee (and without all the plastic wrapping). Lastly, our restaurant experience in the evening was also quite mixed - even though the food was good, the waiter who was loudly snorting and sniffing whilst serving us was rather unappealing. He also dropped the cork of our wine bottle on the ground and initially put it back into the bottle. For the price level of the restaurant, we expected something better.

We are just back from a 4 night stay at Tierra del Agua. it was a beautiful hotel set in stunning scenery. The staff, apartment and food were all great and the pool was amazing! The room was also very spacious for a family of 4. We look forward to coming back soon ☺️

Tenía muchas ganas de ir a este hotel y mi novio me lo regaló por navidades. Cogió un finde de mayo y como había que cancelar con 15 días de margen pues no nos quedó otra que ir a pesar de que este fin de semana llovió sin parar. Es el primer punto que pondría como negativo pues a 15 días es imposible saber el tiempo, máxime en primavera - verano que vas pudiendo disfrutar de algunos servicios como por ejemplo la piscina ( yo de hecho pregunté expresamente cuando lo abrían). Este finde la semana anterior ya avisaron de que había una DANA. La falta de flexibilidad que tienen para eso parece que para otras cosas no importa. Reservamos el spa a las 20:00 porque duraba una hora y luego teníamos cena a las 21:30 y hasta las 20:30 no vinieron a avisarnos. La explicación fue que una pareja había estado media hora más , cero control y cero responsabilidad con los tiempos de los demás. Otra cosa negativa el desayuno: se supone que te pican a la puerta a la hora que indicas. Pues a nosotros nos dejaron la cesta en la puerta sin avisar y porque la abrimos pasados 5 minutos a ver si venía alguien. Después el café de cápsula , cuando hay una cafetera en el bar, los huevos fríos y el bacon parecía recién sacado del paquete sin hacer. Creo que dado que el alojamiento no es muy grande podría darse la opción de tomar ese desayuno en el restaurante recién hecho y así con más calidad. Dicho esto el entorno es precioso y se respira una tranquilidad enorme, pero creo que el hotel ha dejado de lado ciertos aspectos porque te lo venden ( y cobran) como una experiencia “5 estrellas” y en este sentido deja un poco que desear.

Fantástica estancia de 3 noches para disfrutar del precioso parque natural de Redes. Un mini apartamento espacioso, calentito, limpio, todo funcionando perfectamente, cama comodísima, con dos sillones frente a un ventanal enorme ideal para la lectura y el relax, con vistas a la aldea y a las montañas. El armario algo justito, pero suficiente. El spa es una gozada. Excelente restaurante. Bar con terraza ideal para las cervecitas. Muy agradecidos a Ana, Luis e Isabel por su atención y sugerencias, gente encantadora. Con ganas de volver!

Ha sido una estancia inmejorable. Lugar muy tranquilo, paisaje perfecto, alojamiento e instalaciones impecables, personal amable... Ideal para estar en plena naturaleza, hacer rutas, descansar y desconectar. Habitaciones con vistas y restaurante con platos deliciosos. Volveremos!

Mi pareja y yo decidimos visitar Asturias por primera vez con el objetivo de disfrutar de su famosa gastronomía y naturaleza. Durante nuestra búsqueda, encontramos este magnífico hotel, que resultó ser todo un acierto. Está situado en plena montaña, en un entorno que transmite paz y tranquilidad, ideal para desconectar por completo de la rutina diaria y aprovechar al máximo, en nuestro caso, cinco maravillosos días. Estamos convencidos de que nuestra experiencia en Asturias no habría sido la misma sin este hotel. Desde las instalaciones, las impresionantes vistas, la agradable temperatura, la deliciosa gastronomía, el entorno montañoso y nevado, hasta el impecable trato recibido por todo el personal, cada detalle ha sido perfecto. Cabe hacer una mención especial a la amabilidad y disposición del equipo, que siempre encontraba una solución a cualquier inconveniente con una sonrisa. Queremos destacar especialmente a Guille, el chef del restaurante. Su cercanía y pasión por su trabajo nos cautivaron desde el primer momento. Nos enseñó caminos locales, compartió tradiciones, rutas gastronómicas y recetas autóctonas, demostrando su amor por la tierra y su oficio. Fue un placer conectar con una persona tan entregada, con quien, sin duda, seguiremos en contacto. También queremos agradecer a Ana, que nos ayudó a resolver cualquier problema, desde cambiar una televisión hasta recomendarnos una de las rutas más espectaculares que hemos realizado: los Lagos de Covadonga nevados. El hotel cuenta con todos los servicios necesarios para garantizar una estancia excepcional: un desayuno delicioso, instalaciones impecables, una atención al cliente inmejorable, piscina, sauna y parking. La experiencia gastronómica merece una mención aparte: les recomendamos encarecidamente probar los torreznos y la tarta de queso! En definitiva, este hotel supera todas las expectativas y ofrece la oportunidad perfecta para vivir una experiencia inolvidable en Asturias. Att: Anais y Adrian