Fuimos desde Rancagua por un camino de tierra largo y malo con la idea de llegar a tomar te y el gerente nos atendió muy mal, muy poco criterioso, si bien no llamamos antes para decir q íbamos a tomar te, eso no justifica no poder ofrecer un café rico con algo para comer. No tenían nada, lo único que pudimos tomar fue un café asqueroso . Muy lamentable, un entorno maravilloso de cordillera, pero los jardines se ven descuidados , la piscina verde de suciedad, un hot tub de fibra de vidrio q se veía del living horrible, la verdad muy lejos de recomendar este lugar. Se ve un lugar a muy mal traer . Una pena .
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